Hola de nuevo, soy Rocío. Bueno, esta vez tendré que hablaros de algo que haya pasado en el instituto porque así lo ha dispuesto Virgilio. Venga, ahí vamos. En esta redacción os voy a contar lo que pasó el día de mi cumpleaños.
El día 28 de noviembre yo decidí traer una tarta para celebrar mi cumpleaños con mis amigos. Tuve que traerla andando desde la otra pate del pueblo. Además también traía la mochila y los batidos. Ese día casi me muero. Sobre las 11:45 decidimos que ya era hora de comernos la tarta. Fuimos abajo a por ella. Mientras subíamos nos encontramos con unos amigos que nos dijeron que nos acordáramos de ellos. Cuando llegamos a la clase empezamos a partirla para los de fuera de nuestra clase y para Yolanda, Pedro y Virgilio. Al final nos quedamos casi sin tarta. Fuimos a llevársela a Virgilio y cuando voy a salir, todos empezaron a cantarme "cumpleaños feliz"... Y nada, después nos fuimos a clase, nos comimos la tarta y ¡¡cumple celebrado!! Bueno, con esto y un bizcocho hasta mañana a las ocho. Un besito.
El día 28 de noviembre yo decidí traer una tarta para celebrar mi cumpleaños con mis amigos. Tuve que traerla andando desde la otra pate del pueblo. Además también traía la mochila y los batidos. Ese día casi me muero. Sobre las 11:45 decidimos que ya era hora de comernos la tarta. Fuimos abajo a por ella. Mientras subíamos nos encontramos con unos amigos que nos dijeron que nos acordáramos de ellos. Cuando llegamos a la clase empezamos a partirla para los de fuera de nuestra clase y para Yolanda, Pedro y Virgilio. Al final nos quedamos casi sin tarta. Fuimos a llevársela a Virgilio y cuando voy a salir, todos empezaron a cantarme "cumpleaños feliz"... Y nada, después nos fuimos a clase, nos comimos la tarta y ¡¡cumple celebrado!! Bueno, con esto y un bizcocho hasta mañana a las ocho. Un besito.
ROCÍO SANTIZO